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Subasta 1038, Lote # 122 ADORACIÓN DE LOS REYES (EPIFANÍA)
MÉXICO, FINALES DEL SIGLO XVII
Óleo sobre tela
Restaurado, reentelado, ligeros repintes
155 x 216 cm
El término Epifanía se refiere a la representación de los tres Reyes Magos en el momento de adorar al Niño en Belén y ofrecerle sus presentes. La Epifanía es la primera Teofanía, esto es, la primera manifestación del Hijo de Dios eligiendo a unos gentiles para indicar la universalidad de su mensaje salvífico. Es uno de los episodios más característicos y representados del Ciclo de la Infancia de Cristo porque con él la Iglesia quiere simbolizar la idea de salvación para toda la humanidad, no solo para el pueblo de Israel, como simboliza la Adoración de los Pastores.
Las formas más habituales de representar la Epifanía en el arte son las que se describen a continuación: La Virgen sedente muestra al Niño en su regazo a los Reyes Magos. A menudo uno de ellos ya se postra ante él, mientras los otros esperan con sus presentes. Además de las figuras, también forma parte de la escena la estrella que les sirvió de guía. El Niño generalmente bendice a los regios visitantes. Junto a la virgen suele estar presente San José, normalmente en un plano secundario y en el caso de esta obra, la sagrada familia se encuentra custodiada por un amplio séquito de vírgenes, una de las cuales porta un medallón en el pecho con la inscripción "madre de Dios". Fue muy común representar los donantes entre los Magos, tal como sucede con uno de los reyes que aparece del lado izquierdo del lienzo, quien además de poseer los rasgos sumamente acentuados, dirige la mirada al espectador. El culto medieval a los Magos se acrecentó cuando sus reliquias se trasladaron a Colonia, Alemania. Según la leyenda, Santa Elena, madre del emperador Constantino, llevó las reliquias a Constantinopla desde Saba, donde habrían muerto. Eustorgio de Milán las transportó en el siglo V a la capital del Milanesado. En 1164, coincidiendo con la invasión de Milán, el arzobispo de Colonia, Reinaldo de Dazzel, las trasladó a su diócesis y se reconstruyó su catedral como gran relicario para tan importantes restos. Respecto a esta pintura algunos especialistas coinciden en que su factura es de origen poblano y podría vincularse estilísticamente con el pintor José Luis Rodríguez Carnero (1649-1725).
Fuente consultada: Rodríguez Peinado Laura, "La epifanía", Universidad Complutense de Madrid, Revista Digital de Iconografía Medieval, vol. IV, nº 8, 2012, pp. 27-44
Estimado $600,000-800,000
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